ACTIVIDADES DISEÑADAS PARA LA INTERIORIZACIÓN DE LA ORTOGRAFÍA
He detectado que mis alumnos de 3º de Primaria cometen
muchos errores ortográficos y considero oportuno trabajar con ellos este
aspecto de nuestra lengua.
Sin olvidarme delos contenidos que la ley vigente marca en
el proceso de aprendizaje de la ortografía en 3º de Primaria: reconocimiento de
las sílabas, identificación de diptongos y triptongos, uso de las reglas de
acentuación, terminaciones en d y z, uso correcto de j y g, uso de h, uso de v
y b, uso de y al final de palabra, uso de los signos de puntuación, separación
de sílabas al final del renglón y uso de abreviaturas. Y proponiendo para el
trabajo de estos contenidos los siguientes recursos: autodictados, ficheros de
normas enunciadas por los niños, juegos con el diccionario, redacciones y
ejercicios de animación a la lectura.
Teniendo en cuenta que las bases fundamentales para el
trabajo ortográfico son la atención, la
memoria visual y el uso funcional de la escritura, me dispongo a preparar
una serie de actividades ortográficas que tengan en consideración estos
aspectos mencionados.
PRIMERA ACTIVIDAD:
El dictado de pared
con alguna pequeña variación que luego explicaré, me parece una actividad adecuada para este grupo de
alumnos de 3º de Primaria. Ya que se trata de una clase muy participativa que
trabaja bien en grupos, por ello esta actividad se ajusta perfectamente a sus
capacidades e intereses.
Los objetivos que me marco para esta primera actividad son:
ejercitar la atención y la memoria visual. Trabajar la pronunciación. Y poner
en práctica el trabajo cooperativo.
Para preparar la actividad escribo frases sencillas en cartulinas, que
posteriormente colocaré en las paredes de la clase. Y divido a los alumnos por parejas.
El siguiente paso del proceso tras la preparación de la
actividad, es la puesta en práctica. Para ello les explico la actividad de
forma clara y sencilla.
Les digo: “Veis las frases que he pegado en las paredes de
la clase, forman parte de un dictado que tenéis que escribir por parejas.
Tenéis que coordinaros bien y repartiros
las siguientes tareas, uno será el
emisario, que va a ser el encargado de ir a las paredes, memorizar las frases y
dictárselas a su compañero y el otro será el escriba, que tendrá que escribir
las frases lo mejor posible haciendo caso a las indicaciones de su compañero. Cuando
terminéis de escribir todas las frases del dictado repartidas por la clase,
juntos iréis corrigiendo el dictado que habéis escrito, tenéis que mirar las
frases colocadas en las paredes y ver los errores que hayáis cometido”.
Tras la puesta en práctica de la actividad que resultará un éxito, ya que participarán
en ella con entusiasmo, toca el momento de la evaluación. Evaluaré si los
objetivos marcados se han cumplido: fijándome en la memoria, la pronunciación y la colaboración
entre los alumnos.
Sabiendo que la motivación es la mejor baza que tengo para
trabajar con ellos la ortografía les preguntaré si les ha gustado la actividad,
y por qué. Si les ha resultado fácil o difícil. Y que creen que han aprendido
haciendo esta actividad.
Una vez escuchados sus comentarios, les explicaré los
objetivos iniciales que quería que trabajaran en esta actividad.
SEGUNDA ACTIVIDAD
La actividad que he elegido es el profesor chiflado.
En esta actividad con mis alumnos de 3º de Primaria quiero
trabajar el siguiente objetivo: trabajar la lectura en voz alta enfocada hacia
la mejora ortográfica.
La penalización de la mala ortografía hace que los alumnos
aborrezcan este aspecto de nuestra lengua y quiero que entiendan que equivocarse y aprender de los errores es el camino correcto para aprender. Les
explicaré que todas las personas
(padres, profesores) cuando empezamos a practicar alguna disciplina en
cualquier ámbito de la vida nos equivocamos, aprendemos y mejoramos a través de
los errores cometidos.
Para preparar la actividad escribiré una serie de frases
sencillas, que posteriormente les distribuiré a los diferentes grupos. Y buscaré objetos que hagan ruido para darle
a cada grupo uno de esos objetos, como por ejemplo: una bocina, una campanilla,
unas maracas, una trompeta de juguete.
Después de preparar el material y distribuir a los alumnos
en grupos, estaré preparada para poner la actividad en práctica. Y para ello
les explicaré como deben hacer la actividad de la siguiente manera:
“Vuestra labor es prepararos las frases que os he repartido
y leerlas en voz alta, dictándomelas a mí y yo según vaya escuchándoos, copiaré
las frases en la pizarra. Tenéis que dictarme las frases lo mejor posible para
que no me equivoque, pero si lo hago por descuido, tenéis que estar atentos,
detectar el error lo antes posible y hacer sonar el objeto que os he dado a
cada grupo . A continuación tenéis que explicarme que fallo he cometido y decirme como
debo corregirlo”. Yo cometeré errores al trascribir las frases en la pizarra
para que la actividad salga bien.
Conociendo a este grupo de alumnos estoy segura que la
actividad les encantará y se divertirán muchísimo.
Evaluaré la lectura en voz alta de los alumnos y la
detección de los errores y corrección de los mismos. Y también les
preguntaré sobre la actividad, si les ha gustado, si les ha resultado
fácil y que creen objetivos intentaba trabajar al proponerles esta actividad.
Cuando terminen de hacer los comentarios sobre la actividad les explicaré cual
era el objetivo que me había planteado para esta actividad.
ACTIVIDADES DISEÑADAS PARA LA INTERIORIZACIÓN DE LA SEMÁNTICA.
Teniendo como premisa que en el proceso de
enseñanza-aprendizaje del vocabulario el modelo verbal del profesor influye
considerablemente en el enriquecimiento léxico del alumno. Y siendo consciente
de que el aprendizaje es mimético, sobre todo en los primeros años de
escolaridad, emplearé un cuidado y apropiado vocabulario. Seré cuidadosa en la
elección de los términos léxicos y me esmeraré en el uso de la lengua que
emplee con mis alumnos para contrarrestar el efecto negativo de nuestra
sociedad utilitarista y simplista.
PRIMERA ACTIVIDAD:
He detectado al corregir un examen que mis alumnos de 3º de
Primaria tienen dificultades a la hora de ordenar palabras alfabéticamente y
creo que es conveniente realizar una actividad de este tipo para practicar este
aspecto.
Antes de realizar la actividad recordamos todos juntos el
abecedario y el orden de las letras en el mismo y lo escribimos en la pizarra.
A continuación les digo varias palabras: planeta, plomo, palmera, paraguas,
pasarela, pulsera, órbita, ombligo, onda, orilla y juntos las colocamos por
orden alfabético. He querido realizar este recordatorio en vista de los
dificultades que he detectado que los alumnos tienen en esta actividad.
Con esta actividad pretendo trabajar con los diferentes
tipos de unidades léxicas, poniendo especial atención en las colocaciones.
Para preparar la actividad elegiré una serie de palabras
para que ellos posteriormente durante la realización de la actividad ordenen
alfabéticamente.
No hace falta que les explique la actividad ya que al ser una actividad convencional
saben cómo realizarla.
Tras su realización corregiremos la actividad, pediré a uno
de los alumnos que la corrija en voz alta y que explique cómo la ha realizado.
Preguntaré a los demás alumnos si han realizado la ordenación de las palabras
bien y poder evaluar si se ha conseguido el objetivo que se pretendía.
SEGUNDA ACTIVIDAD:
La segunda actividad que les voy a plantear a mis alumnos de
3º de Primaria va a ser las 10 diferencias y las diez semejanzas, que pertenece
a las actividades lúdico-didácticas para el desarrollo de la semántica y el vocabulario.
Y que tiene como base la activación del vocabulario pasivo.
El objetivo que pretendo
con esta actividad es: trabajar con el vocabulario siempre en un
contexto comunicativo oral o escrito.
Buscaré dos objetos que tengan una contextualización en los
actos comunicativos orales y escritos del aula.
La puesta en práctica la realizaré repartiendo a los alumnos
las dos láminas con los diferentes objetos y les explicaré que lo que tienen
que hacer es observar los dos objetos y encontrar 10 semejanzas y 10
diferencias que tengan los objetos entre ellos. Darán sus opiniones, activando
el vocabulario activo (es el utilizamos como emisores), así como el pasivo (el
que no utilizamos como emisores pero comprendemos como receptores).
Para evaluar esta actividad me centraré en las diferentes
aportaciones realizadas por los alumnos, y como han utilizado el vocabulario
(activo y pasivo) en el contexto comunicativo oral.